Nunca te arrepientas de ningún día de tu vida.
Los buenos días te dan felicidad.
Los malos días te dan experiencias.
Ambos de ellos son esenciales para la vida.
La felicidad te mantiene dulce.
Los intentos te mantienen firme y fuerte.
Las penas y sentimiento te mantienen humano.
Las caídas te mantienen humilde y honrado.
El éxito te mantiene brillante.
Pero solo Dios te mantiene caminando...!
No hay comentarios:
Publicar un comentario